La receta de hoy, no es mía, es de Feli, mi suegra, y la hemos echo en mi casa entre las dos. Es una receta de las de toda la vida, y a ella, que le gusta mucho cocinar, hace cada guiso sin prisas, con gusto y con mucho mimo porque se nota que le encanta.
Yo la conozco desde hace 32 años y en todo lo que le gusta pone mucho interés. Cuidaba a sus nietos (mis hijos) de maravilla cuando nos íbamos de viaje, a sus gatos igual (duraron más de 18 años), no se le marchita ni una sola planta y ahora cuida de mi suegro genial, sobre todo en sus comidas (es diabético) llevando a rajatabla su dieta.
Y luego dicen que las nueras nos llevamos mal con las suegras!! Jajaja.
Ahora vamos con los ingredientes...
-250 g de arroz
-1/2 pimiento rojo grande
-1/2 pimiento verde grande
-Hebritas de azafrán
-2 dientes de ajos
-2 patatas
-250 g de bacalao desalado
-1 cayena (opcional)
-1 hoja de laurel
-Aceite de oliva
-Sal y pimienta
-Agua
-Agua
En primer lugar, troceamos los pimientos, picamos los dientes de ajos y reservamos.
A continuación, en una sartén honda grande, ponemos aceite de oliva y pochamos en este orden, primero los pimientos, cuando estén más o menos blandos, añadimos los dientes de ajo picados y seguidamente las patatas, que previamente habremos cortado de un centímetro de grosor aproximadamente.
Rehogamos bien las patatas junto con las verduras y podemos añadir ahora el bacalao cortado en trocitos pequeños o bien al final cuando las patatas estén en su punto. Ahora es el momento de cubrir con agua (yo suelo poner 2 vasos de agua por 1 de arroz) e incorporaremos unas hebritas de azafrán y una hojita de laurel, si nos gusta un ligero toque picante, sería justo ahora cuando añadimos la cayena.
Sazonamos y molemos un poco de pimienta negra que echamos sobre lo anterior. Removemos y añadimos el arroz. Dejamos cocer hasta que las patatas estén en su punto y si no hemos incorporado el bacalao antes, este es el momento de hacerlo.
Movemos un poco para que se mezcle bien y así, el bacalao que acabamos de añadir se atempere. Ahora probamos si el arroz está en su punto y ya podremos servirlo en un plato.
Quedó estupendo. Si no os gusta el picante, no lo incorporéis, porque siempre le cae el único trocito de cayena que hay en el plato al que no le gusta nada el picante y le puede dar un ardor de boca importante, porque sino que se lo pregunten a mi hijo, casi hubo que llamar a los bomberos, jajajaja.
Espero de verdad que os guste, está realmente bueno y además es saludable.
Un beso:)